Podología en los pacientes diabéticos
En la Clínica Podológica M.O, ofrecemos a toda Barcelona la posibilidad de controlar los diferentes pies de riesgo, en particular, el pie diabético.
Trabajamos junto al ICS para asegurar que los pacientes diabéticos en Barcelona tengan la suficiente información, los suficientes cuidados y prevención.
El índice de mortalidad de un paciente con Diabetes Melitus que haya sufrido una amputación, es similar al cáncer de mama.
Pese a esto, escasas son las campañas de concienciación, es por esto, que la educación sanitaria en consulta es de vital importancia, para garantizar que cualquier anomalía en el apoyo no acabe desembocando, no solo en callosidades sino en ulceraciones que son fuente de infección y posterior pronóstico complicado.
Realizamos exploración vascular con Doppler, donde nos permite valorar de forma mas estricta el sistema vascular.
Realizamos exploración sensitiva, dolorosa, térmica y vibratoria, para adelantarnos a cualquier situación que por falta de sensibilidad del paciente, lleve a una menor alarma por parte del paciente.
El ser humano, al sentir dolor, siempre le queda la esperanza de que sea transitorio, relativizando su importancia, pero es que si además no existe la sintomatología dolorosa, con frecuencia relativizamos los riesgos y las complicaciones acostumbran a ser mas severas.
Revisiones periódicas de estos pacientes diabéticos garantizaran que los riesgos serán minimizados, pues tanto la educación sanitaria que ofrecemos, como la rápida respuesta ante lesiones presentes, hacen que consigamos reducir enormemente los pacientes con complicaciones importantes que acaben en amputación.
La Diabetes es una enfermedad que no duele, pero no por ello es un problema menor, sino curiosamente todo lo contrario.
¿Por qué es importante tratar el pie diabético?
El sistema vascular en los pacientes diabéticos va deteriorándose, generando una dificultad en el riego sanguíneo de zonas como los pies.
Esa falta de riego sanguíneo deteriora progresivamente nuestra sensibilidad y es por eso que los pacientes diabéticos no perciben el dolor o la temperatura como en situaciones normales.
Esa sensibilidad es vital para la supervivencia, pues nos protege de temperaturas altas que pueden generar una quemadura o de objetos que podrían generarnos un corte o que se pueden incrustar en nuestra piel.
Cuando finalmente esa no deseada herida por no haber tenido nuestro mecanismo de alerta (sensibilidad) en condiciones óptimas aparece, tenemos un problema añadido.
El deficiente riego sanguíneo presente en el pie, dificulta la curación de cualquier herida, pues no llega suficiente sangre como para regenerar los tejidos dañados como en condiciones normales, pero es que además la alta concentración de azúcar en sangre facilita la proliferación de bacterias y la consiguiente infección.
Una de las recomendaciones que damos desde el primer día en consulta es por el anterior motivo, la revisión del calzado antes de colocarlo en los pies, para confirmar que no tenemos dentro alguna piedrecita o similar que acabara generando una herida.
Aunque presentar una úlcera no quiere decir que la situación sea grave, si puede acabar complicando mucho la situación. Por lo tanto si bien en todas las patologías debemos trabajar en la prevención, en la diabetes es el principal objetivo.
Detectar en estos pacientes zonas de presión que pueden acabar en duricias y finalmente en ulceras será de vital importancia. Realizando en estos casos plantillas ortopédicas con la intención de reducir esas zonas de máximas presiones.
Cuida tus pies con nosotros, somos podólogos especialistas en pie diabético.